lunes, 8 de septiembre de 2008

LA ZURDA

Un sábado,serían las diez de la noche,dí por terminada esta etapa de mi vida.Me cansó la sucesión de frustradas renovaciones,las mas, cosméticas o superficiales,y ninguna lo suficientemente revolucionaria.Me fuí a dormir con una decisión indeclinable.A partir del domingo, sería zurdo.La pava en la izquierda y el mate en la derecha y no me llamo demasiado la atención el peligroso tremolar del chorro de agua caliente, lo que mas me impresionaba era la torpeza con la que sostuve el mate con la que otrora consideraba infalible mano derecha.Empezaba a descubrir que solo suponemos algunas habilidades menores que delegamos a nuestra mano secundaria y que los hechos desenmascaran nuestra soberbia de pensar en la suficiencia de la supuesta idónea.Obviamente que debía perfeccionar el uso frecuente sobre todo en pequeñas cosas tales como el manejo del papel higiénico,pero dadas las características intimas de tales procedimientos,tuve la tranquilidad de saber que no serían sometidas al escrutinio ajeno.La barrera orgánica, me fué de muy difícil resolución.¿Como saber si primaba tal o cual hemisferio del cerebro,tal riñon, tal testículo?.Teoricamente, si inclinaba mi cuerpo a la izquierda, el flujo sanguíneo por lógica gravedad, irrigaría más mi lado izquierdo.Mientras caminaba a la Ortopedia Alemana cargando el peso de mi cuerpo en la pierna izquierda,la cabeza ladeada en el mismo sentido me dió por pensar en mi fiel hígado, pero hay decisiones que deben cumplirse,toda una vida yendome como la mierda con mi lado derecho así lo sugería.Me rompieron el culo con el bastón canadiense, pero lo compré con los ahorros que haría del tinto futuro.Mis compañeros de oficina,timidamente preguntaron,supusieron,sugirieron, pero yo,imbuido de esta nueva mística,no les contesté.Nunca hube en el pasado puesto tanto empeño en mi trabajo,sin embargo a través de interpósitos supe que el jefe me llamaría de un momento a otro.No tuve una respuesta satisfactoria a su pregunta,no pude desmentir su desmesurada admiración por tanta aplicación al trabajo dada mi circunstancia,ni quise interrumpir su panegírico ante propios y extraños sobre mi modestia y mutismo sobre el supuesto accidente.El Presidente de la empresa en persona gestionó una suculenta pensión.Hoy tengo una reposada vida, mucho mejor que la vivida con la derecha.Eso sí, tiré el bastón a la mierda porque se me entierra en la arena.

2 comentarios:

un viejo tanguero dijo...

¡Muy bueno!

Nicolás Cavern dijo...

Muchas gracias Don UVT venga seguido a lisonjearme que me levanta la autoestima.
Beso viril y marinero.